viernes, 13 de enero de 2012

Milia.

Yo estaba dispuesta a morir de amor por vos cada día. Estaba dispuesta a robarte todas las sonrisas que sean necesarias para que seas feliz. Estaba dispuesta a abrazarte cuando te sientas sólo y cuando creas que tu mundo se viene abajo. Estaba dispuesta a acariciar tu pelo cada noche hasta que te quedes dormido. Estaba dispuesta a caminar a tu lado hasta que se terminen tus días, o los míos. Yo estaba dispuesta y muy segura de querer hacerlo. Y hoy te veo acá, tan cerca pero tan lejos al mismo tiempo. Nos saludamos como simples desconocidos. Vos no sos el mismo, y yo tampoco. Cambiamos y hoy somos polos totalmente opuestos. Aunque después de todo, vos también planeaste una vida conmigo. Podríamos dejarlo todo y viajar bien lejos. Olvidar cada lágrima y trasformarlas en sonrisas. Podríamos volver a ser los del comienzo. Pero no sería justo, no para mi.







-

No hay comentarios: